El thriller imprescindible

      

Tener diecisiete años y estar solo, sin unos padres que te entierren y mucho menos que te protejan, encontrarte cada día al ponerse el sol en la rocosa ladera de una montaña de Afganistán con las sombras alargadas como única protección, viendo pasar balas y fragmentos de roca mientras unos hombres endurecidos desatan a los perros del averno, estar en el ojo de un huracán viendo cómo el mundo gira y se desintegra a tu alrededor, oír el ensordecedor rugido de rotores y motores, el retumbar de las ametralladoras y de los cañones cada vez más cerca, mantenerte firme en el sitio, sin encogerte ni huir, y manejar una palanca haciendo frente a la muerte que viene veloz a tu encuentro, contar los segundos interminables que faltan para que uno de los caballos del Apocalipsis huya despavorido, girar la palanca y guiar el proyectil hacia la blanda panza de su motor y sentir el calor de la explosión, y después percibir el olor a muerte y a carne quemada y comprender de repente que no es la tuya, por lo menos esta vez… En fin, no hay muchos hombres que sean capaces de hacer eso.

       Tres veces jugó el Sarraceno a uno de los juegos más mortíferos de “a ver quién es más valiente” que se conocen, y tres veces ganó. El caudillo Abdul Kan jamás se reiría de nada que dijera un hombre así.

Soy Pilgrim, Terry Hayes.
Traducción de Cristina Martín Sanz
                                                                                

Comentarios

  1. Excelente traducción. Un buen libro, con una magnífica traducción es la mayor suerte que tenemos los lectores. Este es el caso de quien busque un masaje de las neuronas, después de trabajar en algo que suponga esfuerzo intelectual… o quien busque, simplemente, el placer de la una ficción bien escrita y muy bien traducida. Muchas gracias.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario